¡Qué noche la de aquel jueves!

Jueves por la tarde, salgo del curro y me recoge mi partener musical para ir a la sala Barracudas a ver un grupo que me asegura me va a molar, los Sticky Boys. El nombre no me dice nada, y tampoco quiero escuchar nada de ellos antes del concierto para no hacerme ningún tipo de expectativa, así que de esta guisa nos plantamos en la Calle Brescia poco antes de las 20:00 h.

Tras una charla acompañada de las jarras de cerveza de rigor, nos metemos en la sala para escuchar a los teloneros de la banda parisina, los madrileños Electric Fence, que con un arranque potente ejecutan su “Stole the Fire” y ya de entrada ponen el listón muy alto. El tema es como un himno y logran transmitir mucha fuerza desde el escenario.

Lo primero que me sorprendió es la voz que tiene Gorjo, que desplegó desde el primer minuto un gran sentido del humor al jalear a los pocos que allí nos habíamos reunido. No hizo falta mucho más, lo bien que sonaban, lo bien que tocaban y el sonido que emitían te arrastraba a un estado de buenrollismo en el que lo único que te importaba era dejar que te siguiese envolviendo ese sonido clásico.

“Red Moon Eclipse”, “Burn Out Blues” y “Motorkiller” hacen que termine de saltar algún tipo de resorte en mi cabeza que me dice que estoy delante de una banda que promete. Eso sumado al cachondeo que se trae Gorjo y el resto de la banda con la escasa audiencia que tienen delante, a la que no hacen más que tratar de lograr que nos dejemos llevar, recurriendo para ello al grito de “¡UN POCO DE ENTUSIASMO COÑO!”

Casi sin dejar tiempo al acabar las últimas notas de “Motorkiller” arrancan su último tema de la noche, “Get Some rock´n´roll (tonite)” y cantando a pie de pista rodeado de los suyos.

En definitiva, una banda 100% recomendable con un futuro prometedor. Rock directo y sin florituras, grandísimo descubrimiento.

Podéis encontrar su música aquí.

SETLIST

Stole the Fire
Don´t Dare
Start Again
Red Moon Eclipse
Burn Out Blues
Middle of Nowhere
Black Widow
Motorkiller
Get some rock´n´roll (tonite)

Tras la euforia inducida en la primera parte de la noche, aparecieron en el escenario tres melenudos con barbas y uniformados con camisas vaqueras y corbatas negras. Poco tardan en sudar como si no hubiese un mañana, tanto por el calor como por la intensidad que muestran.

Arrancan con “Mary Christmas” para enlazar sin parar con “Bad Reputation”. Solo al final de este tema se presentan para acabar con el lema popular de las cabezas motoras de Lemmy “we play rock´n´roll”.

Y, aprovechando que el nombre del Dios ha aparecido, he de añadir que a ratos parece que estuviese escuchando a Motörhead pasado por la túrmix junto a AC/DC y Ramones. Y menos mal que decidí no escuchar nada antes de venir a verlos, menos mal, porque así la sorpresa ha sido increíblemente gratificante.

Su sonido es sencillamente brutal, van enlazando un tema tras otro sin descansar, deleitándonos con pelotazos del calibre de “The Game is Over”, “Miss Saturday Night”, o “Great Big Dynamite”, dándolo todo y haciendo que nos acerquemos lo más posible al escenario. Se marcan dos tandas de 5 canciones seguidas para parar unos segundos y gritarnos a los allí presentes un “Are you fucking ready? MAKE SOME NOISE!” mientras afinan la guitarra.

Alex Kourelis va mutando en Lemmy con el paso de las canciones, hasta llega a poner su pose, cantando con la cabeza hacia arriba y la mirada perdida en el infinito. Éste junto a Chesnot, al bajo, se mueven de manera coordinada cual coreografía de Status Quo. Rebosan energía y tienes la sensación de que todo lo hacen muy sencillo, lo cual es algo totalmente meritorio, lo más simple tiende a ser lo más complicado. El calor es intenso, tanto que el batería Tom Bullot, que empezó con unas latas de cerveza, ya está con un mini refrescándose el gaznate.

El final del concierto se vuelve algo épico con una versión del “Surfin´USA” de los Beach Boys.

¿Repetiría? Sin dudarlo, y como dicen en una de sus canciones BANG THAT HEAD!!!