Siempre es arriesgado organizar conciertos en domingo. La penúltima semana de enero, Kivents y On Fire se embarcaron en una de esas apuestas arriesgadas que merecen ser escuchadas: los suecos Apocalypse Orchestra, una formación de doom metal relativamente nueva que está ganando cada vez más y más adeptos, han decidido lanzarse en su propia gira para presentar su genial LP debut The End Is Nigh (2017). Su paso por España estuvo marcado por tres fechas, acompañándoles en todas ellas los madrileños Survael. En Vitoria y Barcelona se incorporaron Débler al tándem. Hasta aquí, todo correcto.
APOCALYPSE ORCHESTRA + SURVAEL
Domingo 26 de enero 2020. Sala Silikona, Madrid.
La fecha que nos ocupa en Madrid (sin Débler), llevaba el nombre de "Winter Metal Night" y se vio marcada por una serie de problemas que lograron superarse y hacerla salir adelante. De entrada, los conciertos iban a tener lugar en la Sala Kithai, pero finalmente se produjo un cambio en la misma semana a la recurrida Sala Silikona. Huelga decir que la asistencia ya pintaba a que se vería mermada, como así fue. Llegado el día, el inicio de las actuaciones se dio con la apertura de puertas a las 20:00, en lugar de a las 19:00 establecidas en el cartel, otro cambio de última hora que no dio tiempo material a informar en los eventos oficiales.
Sea como fuere, lo importante es sacar adelante las actuaciones: a las 20:30 estaban plantados en el escenario los miembros de Survael, quienes basaron su set en Savage Tales (2016), como han estado haciendo hasta ahora. Tras la naturalista intro "The Wolf", la banda arrancó su show de una manera de lo más acertada, con el trallazo de "Go Back Home". Velocidad, doble pedal y mucha reminiscencia al death melódico clásico (incluso al black), aderezadas con un estribillo de lo más coreable.
"The Nature’s Revenge" supuso un giro hacia las melodías épicas y a la interacción con el público gracias a sus coros, apoyados por toda la banda, además de la influencia del folk. Miguel Jareño presentó "The Green Eyes", inspirado en la leyenda del mismo nombre escrita por Gustavo Adolfo Béquer, seguida de "Where The Sun Rises". En ambas hay un trabajo alucinante de armonización de guitarras por parte de Álex González y David Arenas que los cargan de dramatismo, por no hablar de los dobles pedales imposibles de José Arenas, muy cercanos a lo que actualmente se hace en el black metal moderno.
Punto y aparte para recuperar "The Watcher", uno de los más queridos de esa primera época que tenía tantas reminiscencias a bandas como Ensiferum. Justo después vino "Death Or Submission", menos melódica y más "dura" que las anteriores, siendo un interesante adelanto de su próximo trabajo del que habrá que estar atentos.
El cierre de sus 45 minutos de actuación llegó con el trallazo "The Queen of Wrath" y las pegadizas melodías de la cuasi folkie "Wild Side of Life", del cupo tarareable de los madrileños. Su sonido no estuvo mal, aunque menos contundente y compensado que en ocasiones anteriores. Si bien el bajo de Joaquín Bermúdez podía entenderse bastante bien, personalmente aprecié cierta diferencia entre los volúmenes de ambas guitarras.
Un punto a favor de sus últimas presentaciones es que se proyectaba un vídeo ambiental acorde con las distintas temáticas de cada canción. Todo un acierto que supone un paso adelante en la voluntad por redondear un espectáculo que en términos musicales es de sobresaliente (aunque, a gusto personal, hubiera sido del todo redondo si hubieran tocado "Desperta Ferro", de su primera época y que nunca falla en directo). Su nivel es altísimo y esperamos que logren tener más repercusión en el futuro. Perderles de vista es un error que, créeme, no quieres cometer.
Setlist Survael:
1. Intro – The Wolf 2. Go Back Home 3. The Nature’s Revenge 4. The Green Eyes 5. Where The Sun Rises 6. The Watcher 7. Death Or Submission 8. The Queen of Wrath 9. Wild Side of Life
Como era de prever, habría cerca de 30 personas en la sala durante la actuación de Survael. El cambio de ubicación había hecho mella. Cuando sobre las 21:30 entraron los miembros de Apocalypse Orchestra, la afluencia ascendió aproximadamente a medio centenar, muy por debajo de lo que se esperaba y respecto a lo acontecido en Vitoria y Barcelona (cabe destacar que ir con Débler, quienes han dado un subidón muy importante desde hace pocos años, siempre asegura bastante público).
Tras la intro, que no era otra que el recurrido "Dies Irae", la formación sueca se disponía a presentar el material de su por ahora único disco de estudio The End Is Nigh (2017), siendo "Pyre" el primer tema en sonar. El arranque de su concierto quedó un poco deslucido debido a que el sonido no fue todo lo contundente que podría haber sido para la propuesta que traen; sin embargo, según avanzaba la actuación, los graves se fueron asentando (al principio resultaba imposible distinguir el bajo de Jimmy Mattsson, luego después sí) y se hizo algo más de justicia al verdadero sonido de la banda.
Su propuesta se basaba en una revisión de dos estilos que hasta ahora nadie había explorado: mezclar lo ornamental del doom metal con las melodías del folk. Estaba claro que no se trataba de una oferta para cualquiera, así que quienes estaban ahí sabían muy bien a lo que iban. "Pyre" estaba cargada de ritmos lentos y su tramo final de bellísimas melodías, armonizadas entre las guitarras y la zanfoña de Mikael Lindström, por no hablar de las voces, encabezadas por el carismático Erik Larsson que, cuando las seguían a coro el resto de miembros, rozaban lo gregoriano. Entre el público, alguno hasta debió de experimentar algún tipo de trance. Dicha tónica siguió adelante con "Theatre of War" y "Exhale", en donde Andreas Skoglund se permitió el lujo de lucirse al doble pedal.
Temas largos, muy elaborados y que desprendían una particular belleza fruto de mezclar las afinaciones más graves de las guitarras de Jonas Lindh y el propio Erik con las melodías folk que mencionábamos antes. Y, cómo no, lentos. El doom es así. Los asistentes supieron dar la respuesta adecuada. En "Here Be Monsters", Erik animó al público a cantar el estribillo junto a él, el más fácil de todos, justo antes de acometerlo. Como bien nos decía el frontman, el doom ha de hablar sobre la muerte (es lo suyo, ¿no?), así que la siguiente en sonar fue "The Great Mortality".
El archiconocido cántico religioso "Pie Jesu Domine" dio paso a "Flagellants’ Song", que parecía una oración en alguna de sus partes. Mikael cambiaba su zanfoña por la gaita —la versatilidad de los músicos especializados en folk puede abarcar un artículo aparte— para interpretar la línea que daba fin a su actuación: "The Garden of Earthly Delights", el single de The End Is Nigh, que el público se conocía bien y, tras ella, el Outro de rigor.
Una peculiar gira que, contra viento y marea, logró congregar a unos cuantos selectos parroquianos que estaban dispuestos a apoyar a las bandas que nos competen. De nuevo, es de agradecer la labor de Kivents y On Fire Records por haber logrado sacar adelante una serie de conciertos que, de otra manera, quizá no hubiera sido posible.
Setlist Apocalypse Orchestra:
1. Dies Irae /Pyre 2. Theatre of war 3. Exhale 4. Here Be Monsters 5. The Great Mortality 6. Flagellants’ Song 7. The Garden of Earthly Delights 8. Outro
Texto y fotos: Javi García.
Álbum completo: