Finlandia de Gloria

Battle Beast + Arion

Viernes, 20 de abril 2019. Sala But, Madrid.

En pleno puente de pascua, el centro de la capital gozó de un ambiente acogedor para recibir al metal más contundente desde tierras finesas. El motivo: el paso de BATTLE BEAST por Madrid durante su gira española y parte de su tour europeo de seis semanas, presentando su quinto trabajo de estudio 'No more Hollywood endings' (2019), que vio la luz apenas un mes antes vía Nuclear Blast Records, acompañados para la ocasión de sus compatriotas ARION.

Con la puntualidad de un reloj suizo, un grupo de finlandeses aparecieron sobre el reducido espacio que quedaba libre del escenario, la cortina que separaba el espacio preparado del cabeza de cartel empujaba a los teloneros hacia adelante, hasta el punto que la batería se alineaba prácticamente dentro del tridente que conformaban la primera línea de batalla, relegando a su teclista a la zona más profunda de la cortina. No obstante, este notable inconveniente no mermó la actuación de los nórdicos lo más mínimo.

Arion fueron los encargados de abrir los shows de toda la gira de sus compatriotas fineses. Aprovecharon tan preciada oportunidad para mostrar en tierras ibéricas, en su mayoría, su más reciente trabajo Life is not beautiful (2018), así como parte de su álbum debut Las of Us (2014) en apenas 45 minutos de actuación.

Estamos ante una banda de Power Metal Sinfónico, donde predominan los sonidos del teclado, las voces melódicas de estribillos pegadizos, y la contundencia de los solos de guitarra y los redobles del par de bombos. Pese a unos primeros chisporreteos en los bafles izquierdos, el concierto se desarrolló con un sonido correcto, en general. Destacó, sobre todo, la portentosa voz de Lassi Vääränen, la cual deslumbraba casi tanto como los focos que lo bañaban en destellos brillantes, unas luces quizá algo cargantes que no hacían más que cegar a las primeras filas del público durante el primer tercio del show.

Pudieron haber gozado de más tiempo, apenas una decena de canciones dejaron a la totalidad de la sala (prácticamente llena para ver a la banda invitada) con ganas de más. Cuajaron especialmente bien “Punish You”, “Seven” (en su versión 2018) o “Unforgivable”, tanto por su sonoridad y sus estribillos, como por la energía que desprendían los propios integrantes, los cuales se mostraron de lo más entregados en todo momento.

Culminaron con el aclamado “At the break of down”, quizá su sencillo más sonado gracias a la colaboración con Elize Ryd (Amaranthe) —el cual llegó a gestarse dos años antes de la grabación del disco— allá por 2016. Por poner una pega, la voz pregrabada de Elize podría haber sido sustituida, bien por el propio Lassi, otra artista invitada que hiciera las labores de segunda voz (y a falta de la propia Elize), o incluso, a falta de presupuesto para una canción, uno de sus compañeros (no sería la primera vez que nos sorprenda la voz de un integrante no vocalista). Pero hubo que conformarse con escucharla.

Como guinda del pastel, durante su despedida al final de su actuación y donde se mostraron especialmente agradecidos con los asistentes, tuvieron el detalle de repartir (además de púas y baquetas) unos posavasos personalizados a doble cara, portada del disco y foto grupal incluida, un artículo de colección poco habitual (hasta que esto sea mainstream y esté al alcance de cualquiera, como viene ocurriendo con las cervezas artesanales, por ejemplo). En resumen, muy buenas y gratas sensaciones las que calaron en los espectadores españoles por parte de Arion. Sin duda, volverán a ser bien recibidos cuando recalen en nuestras tierras en el futuro.

Setlist ARION:

The End of the Fall

No One Stands in My Way

I Am the Storm

Punish You

Seven

The Last Sacrifice

You're My Melody

Unforgivable

At the Break of Dawn

Apenas media hora de descanso fue más que suficiente para que no decayera la expectación de una sala But con una asistencia casi completa, siendo este uno de los mayores logros de la promotora al reunir en plena Semana Santa a un respetable que priorizó acudir a un cartel tan atractivo como asequible, antes que salir de la capital y hacer de este evento su mejor opción vacacional. Chapó.

Ya con el escenario completamente despejado y con espacio suficiente para subir a medio aforo, Pyry Vikki se emplazaba sobre su batería, erigiéndose sobre ella en medio de un espectro de luces ante los aplausos del público. Sonaron así los primeros compases de platillo y los redobles para dar entrada al resto de miembros de Battle Beast, llegando en último lugar —para elevarse en la plataforma central y sobre el nivel de cabezas alzadas mirando al cielo— la imponente Noora Louhimo, más exuberante y llamativa que de costumbre (en detalles que nos desveló a lo largo del show). De esta manera comenzó a sonar “Unbroken”, apertura del set y primer corte de No more Hollywood endings (2019).

El nuevo trabajo de los fineses abarcó más de la mitad de su repertorio, donde destacaron (especialmente por la reacción de los presentes) los hits “Eden”, “Rise Your Fists”, “The Golden Horde” o el propio sencillo homónimo que da título a este quinto disco de estudio. La frontwoman ejerció a la perfección como maestra de ceremonias, dando el cante vocal (su vozarrón es incuestionable) y visual en una puesta en escena más teatral y contundente de lo que nos tienen acostumbrados: los cuernos en su cabellera, el cetro de dragón —cual Maléfica— o el pie de micro de garra de águila son solo un ejemplo de ello. Si además lo visualizamos bajo humaredas de colores rojos y neones azules, cada aporreo de teclado, cuerda y bombo transforma el proscenio en una discoteca propia de los años ochenta.

Musicalmente sonaron perfectos, cada uno en su instrumento y durante los solos, ya fueran de guitarra o teclado, donde los hermanos Björkroth formaron un tándem espectacular. Tanto espacio resultó inapreciable cuando todos y cada uno de ellos quisieron subirse a la tarima preparada para Noora, quien tenía que echarles literalmente de su “altar” para volver a encandilar al público, todo entre las risas de sus compañeros y el buen rollo que se deja ver en los directos de Battle Beast.

Para alternar su reciente creación, nos recordaron pelotazos de su anterior Bringer of Pain (2017), con los más representativos “Familiar Hell”, “Straight to the heart” o “King for a Day”. También rescataron algunos clásicos del calibre de “Out of Control”, “Black Ninja” o la discotequera “Touch in the Night”, que mantuvieron al respetable embelesado con el sonido ochentero, coreando los estribillos y alzando los puños junto a una incombustible Noora, pese a la aparatosidad de su atuendo.

Una vez rebasado el “Eden” de canciones, hicieron un alto en el repertorio para cerrar con el trío de bises, que culminó con “Beyond the burning skies” y la ovación de todos los presentes. No era para menos: casi 80 minutos sobre las tablas resultaron efímeros con el buen hacer de los fineses, algo que pareció hasta escaso y solo dejó ganas de más.

La pega (insistimos, por poner alguna) fue que, en plena gira promocional de un nuevo disco (como es lógico), es imposible rescatar los clásicos que Battle Beast ha forjado dentro del heavy metal desde su nacimiento. Aparte de todos los que se quedaron en el tintero —echamos de menos “Let it roar”, “Kingdom”, “Out on the streets”, “Speed and danger”, “Iron Hand”… etcétera—, no hubo cabida para ninguno en absoluto de su primer álbum, Steel (2011). Este simple hecho huele (quizá) a una clara intención de dejar atrás la época Valo-Kabanen y reforzar la actual asociación Nouhimo-Björkroth (presente paralelamente en otro proyecto más pesado, Brymir), aunque orientada a partir de ahora a ritmos más melódicos y bailables —tipo "Touch in the night"— que los contundentes y heavy-metaleros originales. Aun así, nada que reprochar a una actuación de diez.

No es descabellado afirmar, a día de hoy, que Battle Beast es una de las bandas que representará el futuro inminente del heavy metal mundial. Prueba de ello fue el excelente recital que ofrecieron, una vez más, en la capital —y, además, una víspera de Pascua de Resurrección—, congregando a todos sus fieles desde diferentes puntos del mapa para brindar otra actuación memorable (y las que quedan).